jueves, abril 07, 2005

Tangas y laceramientos anales

Los tanga: un peligro para la salud de las mujeres
Las braguitas tipo tanga, particularmente cuando se combinan con vaqueros bajo la cintura, pueden ocasionar infecciones vaginales, hemorroides y laceramiento anal, así como un incremento del riesgo de contagio de enfermedades venéreas. Esto es lo que se desprende de un concienzudo estudio realizado entre centenares de mujeres portadoras de tanga.
Isidro Tomasa, ginecólogo del Instituto de Salud de la Mujer, ha llevado a cabo una rigurosa clasificación de los distintos diseños de ropa interior femenina para llegar a unas conclusiones muy alarmantes. "Hemos descubierto que la mayoría de mujeres que llevan "La Combinación" (braguitas tanga y vaqueros bajo la cintura), especialmente aquellas que frecuentan bares de bebedores, tienden a mantener prácticas sexuales de riesgo", apostilla el experto. No solo eso: "También hemos descubierto que el rozamiento del tejido en el interior de las nalgas hace que las mujeres que utilizan esta prenda íntima tengan más probabilidades de padecer inflamaciones vaginales, laceraciones anales e infecciones bacterianas".

La noticia ha irrumpido como un reguero de pólvora en el ejecutivo socialista que últimamente solo gana en problemas. Conscientes de que gran parte de la población escolar viste tanga por una cuestión de comodidad, el ministerio de educación ha instado a todos los docentes a "cerciorarse de que sus alumnos no los llevan y quitárselos si hace falta".

Afortunadamente, el ministro del interior, José Antonio Alonso ha tomado las riendas del asunto y se encargará personalmente de controlar que a partir de ahora las mujeres españolas lleven una lencería más benigna para sus partes nobles.

El presidente Zapatero en persona ha hecho un llamamiento a la población: "Necesitamos educar a la sociedad sobre un nuevo dilema. Si bien la mujeres que las usas tienden a ser más sexy, los pobres médicos que tienen que hurgar allí abajo lo pasan muy mal". Acto seguido, ha avanzado que el ejecutivo está considerando la posibilidad de legislar la obligatoriedad de que estas prendas lleven etiquetas de advertencia para dejar bien claro los riesgos asociados a este tipo de lencería.

Según se desprende del estudio es especialmente preocupante el caso de las mujeres que llevan tangas mientras realizan actividades físicas intensas. "Todos aquellos ejercicios que provoquen sudor, como, por ejemplo, caminar a cuatro patas, son actividades demasiado temerarias porque cortan el riego sanguíneo en toda la vagina. Es mucho mejor no llevar ningún tipo de ropa interior", asevera.

Extraído de mundocruel.com

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si es que son todas unas guarras.
Yo cuando veo a una embarazada, pienso que se la han follao.
¡Rabos fuera!

Marlon Brandy dijo...

¿Y la becaria, qué me dices de la becaria? ¿Eh, eh?